La preocupación por recuperar estos 20.291 metros cuadrados de bosque tucumano se intensificó a partir de una serie de artículos que publicó LA GACETA, en los que se remarcó el deterioro del parque. Para conseguir los fondos para la recuperación se lo incorporó como bien protegido por la ley de Bosques Nativos (23.331).
Gilles Lacroix, Celine Lardinois y Boris Nosdrovisky son tres profesionales belgas que participan activamente. Fueron los encargados de censar las especies que se encuentran en el interior (el último censo lo había realizado la Facultad de Ciencias Naturales de la UNT) y de diseñar un nuevo recorrido: un circuito principal y sendas secundarias que llevarán diferentes nombres.
"En total se midieron y censaron 35 especies principales (árboles de más de 10 centímetros de diámetro, nativos o no) y se colocarán 21 carteles a lo largo del circuito para mostrar los más representativos", explicaron los profesionales, quienes también colaboraron en la Reserva Natural Los Sosa y en otras del país.
Gilles es ingeniero forestal, Celine es paisajista y Boris, ingeniero en Ordenación del Territorio. Esta recorrida coincide con un año de prácticas que decidieron realizar luego de haberse recibido.
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